El Parc Agrari del Baix Llobregat tiene futuro, pero necesita jóvenes emprendedores. .
Uno de los orgullos del Área Metropolitana, por lo menos de algunos municipios, es que todavía existe actividad agrícola. Sin embargo, esto podría cambiar porque según AMB el 65% de los payeses de la región de Barcelona tiene más de 55 años, y no está claro que haya continuación.
Hacen falta emprendedores agrarios, pero bien formados, porque el modelo agroalimentario necesita digitalizarse y crear ciclos de cultivo y comercio de proximidad.
CAMBIO DE TENDENCIA
A pesar del cambio en el consumo, que ha provocado un repunte de las vocaciones agrarias desde 2008, la tendencia es a un abandono progresivo de los campos. la razón es que los payeses se hacen mayores y sus familias no quieren continuar con la actividad. Se abre así una oportunidad de negocio o de trabajo para jóvenes dispuestos a emprender la aventura.
Esos sí, la agricultura de hoy en día ya no pasa por el simple esfuerzo y las horas dedicadas. Los nuevos modelos de producción exigen incorporar innovaciones tecnológicas, tanto para hacer la agricultura más sostenible como para que sea más rentable para el productor. Aspectos como el control remoto de la producción, la automatización de algunos procesos, la reducción de los ciclos productivos, pero también las nuevas formas de comercialización y venta, exigen jóvenes adecuadamente formados.
CIEN MIL EMPLEOS, DE MOMENTO
A nivel institucional la previsión es potenciar las ramas de la FP del sector agrario, pero a nivel general hay que promover nuevas vocaciones entre los más jóvenes. No hay que olvidar la importancia de la cadena agroalimentaria en la región de Barcelona que genera, ahora mismo, más de 100.000 puestos de trabajo y unas 10.000 empresas. Y todavía podría generar mucho más si el público demanda más productos de proximidad.
