En 22 años el Besòs ha pasado de ser uno de los ríos más contaminados de Europa a ser un río normal. El camino ha sido largo y lleno de trabas, pero ahora sí que se ve un final, un buen final. Y un paso importante en este sentido es la puesta en marcha del parque fluvial del Besòs.
A finales de enero se iniciaron los trabajos de renaturalización en el tramo de Santa Coloma con el objetivo de mejorar la biodiversidad, aumentar la resiliencia del ecosistema fluvial y mejorar las condiciones para el desarrollo de la fauna. La primera fase del proyecto prevé la generación de lagunas en el margen derecho del río y la creación de un gran espacio de educación ambiental visitable. Este espacio se concibe como una gran aula ambiental al aire libre pensada para familias, escuelas y estudiantes universitarios.