Gervasio Deferr en su gimnasio en una imagen de RTVE.

Paseando por La Mina podéis encontrar cualquier día de estos a todo un campeón olímpico de gimnasia. Pero Gervasio Deferr no está de paso por Sant Adrià, sino que trabaja en La Mina en un proyecto deportivo que ofrece una oportunidad a los niños, y sobre todo a las niñas del municipio.

Deferr acabó su carrera gimnástica en las Olimpiadas de Pekín, en 2008. Sin embargo, a pesar de ser uno de los deportistas más laureados de la historia de la gimnasia en España, tuvo que comenzar casi desde cero, con 30 años. Entonces apareció la oportunidad de crear su propio gimnasio y lo hizo en la Mina, un lugar que conocía bien. Allí forma a futuras promesas de la gimnasia, pero, sobre todo, les enseña a disfrutar de la esencia del deporte, que no tiene nada que ver con la fama ni con el dinero.

El Club de Gimnasia La Mina Gervasio Deferr es una escuela de gimnasia artística y aerobic dirigida de forma educativa y social, pensada para dar una oportunidad a jóvenes vulnerables de convertirse en buenos (y quizás en grandes) deportistas. Además, Deferr escogió la Mina precisamente porque conocía el barrio y quiso lanzar allí un proyecto que dejara atrás todos los prejuicios. Quizás, un día, algún campeón olímpico explicará que comenzó en la Mina. Hasta que llegue ese momento, son centenares los jóvenes que han aprendido allí algo mucho más importante que cómo se gana una medalla.

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