Han empezado las obras de la segunda fase de renaturalización del río Besòs, concentradas esta vez en el entorno del Parc de Can Zam para mejorar la conexión con el río y con la Serralada de la Marina. El proyecto, con un presupuesto de más de 2 millones de euros, está financiado por el Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramanet y la Fundación Biodiversidad, a través del Pla de recuperació, transformació i resiliència.
En concreto se actúa en una zona de 185.527 metros cuadrados en la que se prevé construir ecosistemas artificiales para incrementar la biodiversidad del río, en una acción en la que colabora el Área Metropolitana de Barcelona como competente en materia de medio ambiente.
El conjunto de la renaturalización está presupuestada en siete millones de euros y se extiende a más de tres kilómetros en los dos márgenes del Besòs, desde aguas abajo del puente Vell hasta el límite municipal con Montcada i Reixac.
La iniciativa prevé la construcción de nuevos humedales, la lucha contra las especies invasoras con plantación de especias de ribera y la mejora de la conectividad de la fauna a lo largo del río y con los espacios naturales de su alrededor.
